domingo, 2 de noviembre de 2014

Entre cantos, flores y rezos, activistas reivindicaron la vida de más de un centenar de mujeres asesinadas

El Día de Dífuntos fue celebrado ayer por un grupo de activistas, quienes elevaron una mesa en el atrio de la Universidad Mayor de San Andrés en homenaje a las mujeres víctimas de feminicidio. A lo largo de la jornada demandaron justicia para las familias de estas mujeres.
Iblin Linarez/ La Paz
La mesa de Todo Santos también estuvo adornada con las fotografías de las mujeres que perdieron la ida este años FOTO Alejandro Heredia 
 Un camino delineado por cajas forradas de tela lila ha sido el lienzo sobre el cual se han depositado zapatos y flores. Al costado se lee el nombre de alguna mujer: Iris Montevilla,  Medeliz Bustillos e Izela Castro, entre otras. “Estas mujeres, junto con otras 154, han perdido la vida este año todas a causa del feminicidio y la inseguridad ciudadana”; explicó Elizabeth Machicado, de la agrupación Activistas por la vida.
Pasankallas, flores y dulces dan color a la mesa del Día de Difuntos en la UMSA FOTO: Alejandro Heredia
Es el mediodía del 1 de noviembre, Día de Difuntos, y el atrio de la Universidad Mayor de San Andrés, que habitualmente es ocupado por jóvenes y comerciantes, luce diferente. Hay un escenario, una mesa repleta de panes, pasankallas platos de comida, refrescos, fotografías de mujeres  y velas. Los curiosos terminan elevando una oración por las 157 mujeres que han fallecido este año. “No está bien que más mujeres mueran así, que nosotros las matemos como si no tuvieran valor alguno”, reclamó Alex Yapu, quien participaba de la actividad.
Mujeres y hombres trabajaron en cada detalle de esta mesa, que fue organizada por iniciativa del grupo Activistas por la vida, la Coordinadora de la mujer, Oxfam, la Defensoría del Pueblo, Centro de Promoción de la Mujer Gregoria Apaza y el grupo Enclave. “Todos hemos colaborado con algo. Es un gran apthapi para nuestras mujeres, para que se sepa que no vamos a olvidarlas, que las honramos y que seguimos reclamando por ellas”, dijo doña Eulogia Tapia de la Defensoría del Pueblo.

Los curiosos no dudaban en acercarse al atrio de la universidad, atraídos por la bulla de la música, el camino de cajas, la enorme mesa y la lista gigante de nombres de víctimas que se colocó a un lado de la fachada. Quienes se animaban a participar de la actividad elevaban oraciones por las almas de estas mujeres y posteriormente eran recompensados con panes.
“Es una bonita iniciativa. Una a veces no sabe qué le pasa a otros y podemos ayudar. Hoy hay que pedir por las almas de estas mujeres para que Dios ayude a hacer justicia”, comentó Alicia Sánchez, quien también participó de la tradición. Sin embargo, este día, más allá de lamentar la partida de estas 157 mujeres, fue una jornada de fiesta, pues a lo largo de la tarde artistas como Luis Rico, animaron la vigilia que se extendió hasta cerca la medianoche
“Todas tenemos un camino que seguir y cuando las matas se les paraliza el corazón de la manera más perversa. Esta mesa no es para el lamento es para los ajayus de estas mujeres, para decirles que nosotros tomamos la posta para defenderlas de aquí en adelante. Basta de seguir siendo las víctimas es hora de empoderarnos”, aseguró Machicado.


Los rostros de las mujeres asesinadas este año se hicieron visibles en el Día de Difuntos FOTO: Alejandro Heredia 


Las tradicionales t'anta wawas adornaron la mesa en memoria de las víctimas de feminicidio FOTO: Alejandro Heredia

En el homenaje también se recordó otros casos pasados hace años como el de la niña Patricia Flores FOTO: Alejandro Heredia

Flores y zapatos para cuestionar a la ciudadanía  FOTO: Alejandro Heredia

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